¿Cómo afecta la regla emocionalmente?

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¿Cómo afecta la regla emocionalmente?

El ciclo menstrual es un proceso fisiológico que involucra cambios hormonales cíclicos, los cuales pueden influir en el estado emocional de las mujeres. Estos cambios pueden manifestarse de diversas maneras, desde leves variaciones en el ánimo hasta alteraciones emocionales más pronunciadas.

 

 

 

Fases del ciclo menstrual y sus posibles efectos emocionales

 

A lo largo del ciclo menstrual, muchas mujeres experimentan cambios emocionales que varían según la fase en la que se encuentren. Estos cambios están estrechamente relacionados con la acción hormonal del estrógeno y la progesterona y su impacto en el estado de ánimo.

 

Fase menstrual (días 1-5)

Durante esta fase, se produce el sangrado menstrual debido a la descamación del endometrio, que ocurre cuando no ha habido fecundación. Los niveles de estrógeno disminuyen, lo que reduce la producción de neurotransmisores. Según algunos estudios, este descenso en los niveles hormonales podría estar relacionado con un aumento en la irritabilidad y la tensión emocional en algunas mujeres.

 


Fase folicular (Días 1-14) 

La fase folicular comienza el primer día de la menstruación y se extiende hasta la ovulación. Durante esta etapa, los niveles de estrógeno aumentan progresivamente. Investigaciones sugieren que este aumento puede estar asociado con una mejora en el estado de ánimo y un incremento en los niveles de energía en algunas mujeres.


Además, se ha observado que los estrógenos influyen en la producción de serotonina, un neurotransmisor clave para regular el ánimo. Algunas mujeres pueden sentir más motivación y claridad mental en esta fase, lo que podría estar vinculado con la actividad cerebral estimulada por el aumento de estrógenos, especialmente en áreas relacionadas con la memoria y la toma de decisiones.

 

 

Fase ovulatoria (Alrededor del día 14)

La ovulación es el momento en el que un óvulo maduro es liberado del ovario. En esta fase, los niveles de estrógeno alcanzan su punto máximo y los niveles de testosterona también aumentan. 


Algunos estudios indican que durante este periodo algunas mujeres pueden experimentar un incremento en la energía y una mayor sociabilidad. Además, estas hormonas pueden influir en la confianza y en la percepción de la atracción, aunque estos efectos varían entre mujeres.

 

 

Fase lútea (Días 15-28)

En esta fase, que ocurre después de la ovulación y antes de la menstruación, algunas mujeres pueden experimentar irritabilidad, ansiedad o tristeza. Estos síntomas suelen intensificarse en los días previos a la menstruación, cuando los niveles de estrógeno y progesterona disminuyen. Diversos estudios han asociado estas alteraciones emocionales con la caída hormonal característica de esta etapa.


A nivel físico, es común sentir fatiga, sensibilidad en los senos o hinchazón, factores que pueden contribuir a los cambios en el estado de ánimo. Además, algunas mujeres experimentan alteraciones en la calidad del sueño, lo que también influye en su bienestar emocional.


Durante la fase lútea, los cambios hormonales pueden provocar síntomas emocionales más intensos en algunas mujeres. Mientras que algunas solo perciben variaciones leves en su estado de ánimo, otras sienten que estos efectos afectan significativamente su vida diaria.

 

 

Impacto de los cambios premenstruales en la función cognitiva

 

 

Las fluctuaciones hormonales durante la fase premenstrual pueden influir en procesos cognitivos como la atención, la concentración y la memoria. Según algunos estudios, muchas mujeres experimentan lapsus de memoria, dificultad para concentrarse o una sensación de "mente nublada" en los días previos a la menstruación. Estos efectos podrían estar relacionados con los cambios en los niveles de neurotransmisores como la serotonina y el GABA, los cuales se ven alterados por la caída de los niveles de estrógeno y progesterona en la fase lútea tardía. 


Un estudio de 2018, que analizó la función cognitiva en mujeres con esquizofrenia, encontró que aquellas con irregularidades menstruales mostraban un peor desempeño en pruebas de memoria verbal y visual, atención selectiva y velocidad de procesamiento. Aunque la relación entre el ciclo menstrual y la cognición aún no está completamente definida, los estudios preliminares sugieren que los cambios hormonales pueden influir en el rendimiento cognitivo de las mujeres.


Es evidente que los cambios emocionales y físicos durante el ciclo menstrual pueden influir en el bienestar de muchas mujeres. Desde irritabilidad y ansiedad hasta dificultades de concentración, estos síntomas son comunes y varían en intensidad.